Convectores eléctricos

Un convector tiene un consumo más elevado que un radiador de aceite, ya que este último conserva mejor el calor. El funcionamiento de un convector es captar aire frío y a través de una serie de resistencias eléctricas este se calienta y es expulsado generalmente por la parte superior. Este sistema es muy eficaz y rápido de calentamiento, pero su hándicap es que es más caro al estar continuamente funcionando. También al ser aire caliente introducido en el interior de la estancia, este se reparte mejor en el ambiente.

Un convector es un sistema calorífico muy adecuado para pequeñas y medianas estancias. El cálculo para saber el que se necesita puede ser de de 1kW para diez metros cuadrados. De esta manera un convector de una potencia de 2000 W sería ideal para calefactar una estancia de 20 metros cuadrados.

Dependiendo de la potencia escogida un convector puede consumir entre 750 y 2000 W los más usuales. Si esto lo traducimos en euros y contando el precio del kW/h en 0,35 céntimos, un convector puesto a una potencia media de 1500 W nos daría un consumo hora de 0,52 euros.

Un convector es un elemento calorífico que emite aire caliente normalmente por la parte superior calentando así una estancia.

Un radiador térmico su forma de producir calor es calentando el aceite que lleva en su interior y de esta forma emitir calor.

La diferencia que mientras un convector está continuamente funcionando para emitir calor, un radiador va conectando y desconectando su consumo en función de la temperatura que va alcanzando el aceite interno, siendo lógicamente más económico de funcionamiento, aunque no tan rápido de producir calor como un convector.