Congeladores verticales

El congelador es unos de los electrodomésticos de la gama de frío que más consumen. Es normal puesto que necesita llegar a una mínima temperatura de -18º C para mantener en perfecto estado de congelación los alimentos de su interior. Los fabricantes de electrodomésticos con sus innovaciones tecnológicas están consiguiendo reducir mucho su consumo y ya podemos encontrar congeladores con clasificación energética D. Los compresores inverter hacen que la producción de frío sea más económica y los nuevos aislantes también reducen mucho la pérdida de frío del interior de un congelador.

Un congelador integrable es el que está diseñado para ir instalado dentro de un armario de cocina. Encima de la puerta original del congelador se pone una puerta de madera como la de los armarios de la cocina, quedando perfectamente disimulado cómo si se tratara de un armario más de nuestra cocina.

Primero hay que saber si el congelador es No Frost o cíclico. Si es No Frost no hará falta descongelarlo nunca y sus paredes siempre estarán más limpias al no adherirse nada en ellas. En el caso que sea cíclico, antes de limpiarlo hay que descongelarlo. No debemos usar nunca ningún objeto punzante, corremos el riesgo de hacer un agujero en la pared y perforar el sistema de refrigeración, siendo esto una avería irreparable y tendríamos que tirar el congelador. Para descongelarlo más rápido lo primero es desconectar el congelador de la red, podemos poner ollas de agua a calentar y cuando estén bien calientes ponerlas dentro del congelador unos minutos con la puerta cerrada, esto ayudará a deshacer el hielo más rápidamente. También podemos ayudarnos de un secador con aire caliente e irlo pasando por encima del hielo para reblandecerlo y así se derrita más rápido. Una vez limpio de hielo, podemos coger un trapo suave y mojarlo con agua y un poco de vinagre, esto además de limpiar las paredes el vinagre ayudará a su desinfección.

Es difícil dar un peso de un congelador vertical debido a la gran diferencia de tamaños que hay, pero por ejemplo un congelador vertical de 85 centímetros que son los más pequeños puede pesar alrededor de 30 kilos y un congelador vertical de 185 centímetros que son los más altos puede llegar a pesar sobre los 80 kilos.

Primero de todo hay los congeladores verticales con una puerta frontal de acceso al congelador y los arcones congeladores que su acceso es por una tapa superior. Luego estarían los congeladores con sistema de frío No Frost, que no producen hielo en el interior y los congeladores con sistema de frío cíclico que sí que producen hielo en su interior y hay que descongelar al menos una vez al año para no perder eficiencia energética. Y a partir de aquí los congeladores verticales se dividirán en alturas que van desde los 85 centímetros hasta los más altos que llegan a medir 185 centímetros. Más características para separarlos pueden ser su acabado bien en color blanco los más generalistas hasta los acabados en acero inoxidable.